La batalla de Stoke Field se
libró el 16 de junio de 1487 y fue el último gran encuentro armado de la Guerra
de las Dos Rosas. En esta batalla 12.000 hombres de la casa de Lancaster al
mando del mismo rey de Inglaterra Enrique VII junto con el Conde de Oxford
derrotaron a la hueste de 8.000 soldados de la casa de York al mando de John de
la Pole, Conde de Lincoln.
Aunque Enrique VII fue coronado
rey de Inglaterra en 1485, su poder y el de sus partidarios de la casa de
Lancaster seguía siendo frágil y en entredicho, sobre todo para las muchas
facciones de la casa de York que esperaban cualquier oportunidad de recuperar
el trono.
Eduardo, Conde de Warwick,
muchacho de 12 años era el pretendiente de la dinastía de York con mayores derechos
pero capturado por Enrique VII se hallaba confinado en la Torre de Londres. En
esos momentos, un sacerdote llamado Richard Simmons o Roger Simons descubrió a
un joven llamado Lambert Simnel de semblante muy parecido a Ricardo de
Sherwsbury, Duque de York e hijo del rey Eduardo IV, el más joven de los
desaparecidos Príncipes de la Torre.
Enrique VII, Rey de Inglaterra
Educando al niño con maneras
cortesanas, Simmons pretendía presentar a Simnel como Ricardo, Duque de
York, con el objetivo de coronarlo como
rey. Más adelante, de pronto cambió sus planes tras el rumor de la muerte de
Eduardo durante su encarcelamiento en la Torre. Pero tras la difusión de los
rumores en referencia a que el joven Warwick realmente había escapado de
Londres, planeó presentar a Simnel como el propio Eduardo. De esta manera,
obtuvo apoyo de influyentes yorkistas donde se incluía a John de la Pole, Conde
de Lincoln. Aunque Lincoln se había reconciliado con Enrique, disponía una
demanda al trono y había sido designado como heredero real por Ricardo III
antes de su muerte.
Es más que probable que Lincoln
supiese que Simnel era un impostor, pero el muchacho ofrecía una oportunidad
para desbancar a Enrique y así vengarse. Dejando la corte inglesa el 19 de
marzo de 1487, Lincoln viajó hasta Malinas, Flandes, donde se reunió con su tía
Margarita, Duquesa de Borgoña. Para apoyar el plan de Lincoln, Margarita
proporcionó apoyo financiero, así como s 1.500 mercenarios alemanes dirigidos
por el veterano comandante Martin Schwartz. Acompañado de un número de antiguos
partidarios de Ricardo III, en los que se incluía a Lord Lovell, Lincoln navegó
hacia Irlanda con sus tropas.
En Irlanda el Duque de Lincoln se
reunió con Simmons que anteriormente había viajado a acompañado de Simnel. Presentaron
al niño al Lord Canciller de Irlanda, Sir Thomas Fitzgerald, Conde de Kildare,
y consiguieron garantizarse su respaldo así como comprobar que el sentimiento
yorkista en Irlanda era fuerte. Para reforzar el apoyo, el 24 de mayo de 1487
Simnel fue coronado como rey Eduardo VI
en la catedral de Dublín. Trabajando con Sir Thomas Fitzgerald, Lincoln fue
capaz de reclutar 4.500 mercenarios irlandeses ligeramente armados para su
ejército. Conscientes de las actividades de Lincoln y Simnel tras ser coronado
como Eduardo, Enrique VII que tenía el niño prisionero en la Torre, no hizo
otra cosa que presentarlo en público para desprestigiar a sus adversarios.
Tras cruzar el mar y llegar a
Inglaterra, las fuerzas de Lincoln desembarcaron el 4 de junio en Furness,
Lancashire. Allí se reunieron con
distintos nobles partidarios de la casa de York y dirigidos por Sir Thomas
Broughton aumentando el ejercito hasta un efectivo de 8.000 hombres. Tras una
marcha dura, Lincoln cubrió 320 Km. en
cinco días y con Lowell a la cabeza derrotó el 10 de junio una pequeña fuerza
real en el páramo de Branham,. Después de evadir en gran medida al ejército
norte de Enrique liderado por el Conde de Northumberland, Lincoln llegó a
Doncaster. Aquí la caballería de los partidarios de Lancaster bajo el mando de
lord Scales luchó una acción dilatoria durante de tres días a través del bosque
de Sherwood. Durante este periodo de tiempo Enrique reunió su ejército en
Kenilworth y comenzó a moverse contra los rebeldes.
Sabedor que Lincoln había cruzado
al Trento, Enrique comenzó el 15 de junio a moverse hacia el este, hacia
Newark. Tras cruzar el río, Lincoln acampó para pasar la noche en un alto cerca
de Stoke, Era una posición con el río situado a tres lados. El 16 de junio a
primera hora, la vanguardia del ejército de Enrique, liderado por el Conde de
Oxford, llegó en el campo de batalla para encontrarse con el ejército de
Lincoln formado en las alturas. En posición a las 09:00 h., Oxford eligió
comenzar la batalla abriendo fuego con sus arqueros en lugar de esperar a que
Enrique llegase con el resto del ejército.
Esquema de la batalla de Stoke Field
Gracias a la intensa lluvia de
flechas sobre los yorkistas, los arqueros de Oxford comenzaron a infligir
fuertes bajas en los soldados equipados con armadura ligera de Lincoln. Ante la
disyuntiva de abandonar la tierra o continuar perdiendo hombres, Lincoln ordenó
a sus tropas avanzar y cargar con el objetivo de aplastar a Oxford antes de la
llegada de Enrique al campo de batalla. Golpeando la linea del Conde de Oxford,
los yorkistas consiguieron cierto éxito al principio pero las tornas comenzaron
a dar vuelta gracias a la mejor equipación tanto en armamento como en armadura
del ejercito real. El combate se alargo durante tres largas horas y al final se
decidió gracias a un contraataque
lanzado por Oxford.
Rompiendo las líneas yorkistas,
muchos de los hombres de Lincoln huyeron quedando tan solo los mercenarios de
Schwartz luchando hasta el final. En la batalla, Lincoln, Fitzgerald, Broughton
y Schwartz murieron mientras Lovell huyó cruzando el río y ya nunca más fue
visto.
En el campo de batalla de Stoke
se quedaron alrededor de 3.000 muertos y heridos del ejercito de Enrique
mientras que los yorkistas perdieron alrededor de 4.000. Además, muchos
supervivientes del ejército vencido, tanto ingleses como irlandeses fueron
capturados y ahorcados. Otros yorkistas capturados recibieron clemencia y
escaparon tras pagar multas y confiscación de sus bienes. Entre los capturados
tras la batalla se hallaba Simnel. Reconociendo que el muchacho no era más que
un peón en la trama yorkista, Enrique lo indultó e incluso y le dio un trabajo
en las cocinas reales. El campo de batalla de Stoke supuso el fin definitivo de
la Guerra de las Dos Rosas y el asentamiento del dinastía Tudor en el trono de
Inglaterra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario